La gastronomía, una nueva oportunidad de atraer turistas a Panamá
Ciudad de Panamá (ANPanamá).- La gastronomía panameña está dando la talla para presentarse con personalidad ante el mundo, y atraer turistas para degustar sus exquisiteces, gracias que la nueva ola de chef está dotándola de un nuevo atractivo “dándole vuelta a las recetas, sin desnaturalizarlas” y cuenta ya con referencias bibliográficas, dijo este miércoles la chef Rachel Pol Policart.
Pol, con una década de experiencia en su especialidad de pastelería, graduada en Estados Unidos y desde hace 16 años dueña de un restaurante en la capital, refirió a ANP que su país “es un punto de cruce” hasta de la gastronomía, pero tiene “en las casas la auténtica comida, o en las fondas de los pueblos”, que es de donde los cocineros jóvenes están sacando la data para “gurmetizar” los platos que “ahora se ofrecen más en las cartas de cualquier restaurante u hotel del país”.
“Estamos comenzando una época de darle valor al producto nacional, es nuestra comidita tan sencilla y reconfortante a la que le estamos dando vuelta con una propuesta más interesante”, más allá del emblemático sancocho, el arroz con pollo o el patacón. “Hay cientos de de platos que se pueden ofrecer”, aseguró.
Panamá siempre ha sido un punto de cruce, la gastronomía panameña se come en casa más que en la calle, estamos comenzando una época de darle valor al producto nacional, acotó la chef, quien tendrá a su cargo, el próximo 16 de octubre, Día Mundial de la Alimentación, de la elaboración del patacón más grande del mundo, con 100 kilos de plátano y de 3,5 metros de diámetro, en la localidad de Ipetí, en la comarca Emberá, cerca a Chepo.
Cuestionada si es cierto que se da poco uso de los productos del mar, explicó que “si se usan, pero es un tema de conservación, de almacenamiento, se usa el pescado fresco, el ceviche con larga cocción, a diferencia del peruano, para preservar el producto”.
Agregó que “si está bien definida la gastronomía panameña” y citó que ya se cuenta con bibliografía, como los libros de los maestros cocineros Charlie Collins y Cuquita Arias.
Los platos panameños “también son fusión y en las diferentes áreas del país se come cada producto, si es un pueblo indígena, o en la costa del Caribe, en la Península de Azuero, o en la occidental Chiriquí, cada una tiene sus propios platos”.
Personalmente se definió partidaria del tamal de olla como el plato que le ofrecería a un turista extranjero, “o un buen sancocho, luego de una buena juerga, porque te revive, es un levantamuerto”, señaló jocosamente.
En cuanto a su especialidad, señaló que la carta panameña tiene “muchos frutales, se ve mucho mejor cacao y chocolate, estamos más enfocados en sembrar y cosechar con mejor calidad, pero el coco, el maracuyá, el guineo, el banano, la piña que es la mejor del mundo, son los que abundan ”.