Panamá consolida oferta turística con hoteles boutique en el interior del país

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(Ciudad de Panamá – ANPanamá). Panamá ha empezado a consolidar su oferta turística con la construcción de diversos hoteles boutiques en el interior de la república, con lo que se espera subsanar una de las principales debilidades del sector hotelero en el país centroamericano, que concentra más del 80% de las habitaciones disponibles en la ciudad capital.

La construcción de estos nuevos hoteles se ha dado principalmente en las provincias centrales del país, especialmente en la zona conocida como Coclé, dónde las inversiones han sido impulsadas con la construcción del nuevo aeropuerto de Río Hato, localizado a hora y media de la capital panameña.

La nueva terminal aérea internacional será inaugurada el próximo mes de septiembre y contará con capacidad para atender a más de 500 personas a la vez y recibir aeronaves de gran envergadura como aviones Boeing 737.

Los hoteles ubicados en la provincia de Coclé en Panamá suman 2.200 habitaciones y durante el año pasado se registraron 1.197 pernoctaciones que generaron $55,7 millones de ingresos por hospedaje, una cifra que estiman se incrementará al final del presente año.

A diferencia de los inmensos edificios con más de 500 habitaciones que suelen construir las cadenas hoteleras más grandes, los hoteles boutiques son pequeños, con menos de 100 cuartos y generalmente predomina el lujo, con una atención personalizada.

En Panamá la mayoría de estos hoteles se concentra en la ciudad capital, aunque eso ya ha empezado a cambiar y el resto del país se suma a la nueva ola. Ahora hay varios proyectos en centros ecoturisticos, lejos del bullicio de la metrópolis panameña.

Una de estas nuevas inversiones es el hotel Los Mandarinos, localizado en el Valle de Antón, a una hora y media en automóvil de la ciudad de Panamá y a unos 30 minutos de donde se construye el nuevo aeropuerto internacional de Río Hato. Esta es una de las zonas turísticas más importantes de Panamá, que comprende una reserva forestal localizada en el cráter de un volcán extinto, el único habitado en el mundo.

Este hotel considerado boutique, cuenta con un Spa y piscinas climatizadas y el mismo fue construido con una inversión de US$3 millones y a pesar de estar localizado en una zona campestre, cuenta con salones para reuniones con toda la tecnología de pantallas, sonido e Internet.

Anne S. Frazao, gerente General del hotel señaló a la Agencia de Noticias Panamá que Los Mandarinos ofrece actualmente 56 habitaciones de distinto tipo, que refuerzan su presencia en el segmento de bodas y luna de miel y recientemente los inversionistas han agregado 25 nuevas habitaciones deluxe, nueve de ellas con jacuzzi, con lo que completan una oferta para el turismo de lujo. “Su proximidad a bosques de montaña le permite ofrecer giras eco turísticas. Un restaurante tipo español es otro de sus próximos atractivos”, dijo la ejecutiva.

Además presta servicios a convenciones corporativas para empresas embajadas, bancos y Organizaciones no Gubernamentales que tienen sede en Panamá. Estos eventos llenan el hotel y tienen un promedio de 2 a 3 noches. También solicitan servicios gastronómicos especiales, guías y excursiones a sitios naturales que rodean el sitio.

Frazao señaló que estas facilidades y su arquitectura única que encanta a los huéspedes el hotel Los Mandarinos, ofrecen un entorno natural, único en El Valle de Antón. “Este es un sitio dentro del cráter de un volcán apagado que goza un clima de montaña”, destacó.

El hotel está próximo a la reserva natural del Cerro Gaital con bosques nubosos. Frente al Cerro de la India Dormida, llamada así pues inspiró una leyenda romántica entre una princesa nativa y un conquistador español.
En la comunidad de El Valle los turistas pueden visitar el mercado artesanal en la calle principal, el Chorro de El Macho, con senderos de puentes colgantes y árboles milenarios. Además se pueden dar baños en piscinas de aguas termales.

Con la diversidad de sus productos el hotel busca aumentar su ocupación, competir en el mercado durante todo el año y no ser solo una empresa que oferta productos de veraneo o de fin de semana.
Los hoteles boutiques también se han trasladado a la zona atlántica de Panamá, en la provincia de Bocas del Toro, limítrofe con Costa Rica, donde se construyó el hotel Punta Caracol.

Piluchy Bordas, gerente de operaciones de este hotel, explicó a medios locales en Panamà que la idea fue crear un acqua-lodge en un entorno virgen y natural, de gran belleza, permitiendo a la vez disfrutar de un apacible descanso gracias a las comodidades que se brindan. El hotel fue construido utilizando las materias primas que ofrece la naturaleza, y los visitantes pueden sumergirse al mar directamente desde sus terrazas.

El presidente de la Asociación Panameña de Hoteles (Apatel), Jesús Sierra Victoria, señaló que la construcción de hoteles boutiques en Panamá es una tendencia positiva ya que se registra un movimiento importante de turistas hacia el interior del país.

Sierra detalló que esta es una tendencia que se incrementará con la próxima apertura del aeropuerto de Río Hato, porque en la actualidad a los turistas se les dificulta obtener vuelos hacia la provincia de Bocas del Toro.