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El capital humano es parte fundamental cuando se trata de ciberseguridad en las empresas

(Ciudad de Panamá-ANPanamá) Según el estudio Breakthrough realizado por Dell Technologies, si bien el 85% del liderazgo empresarial en América Latina considera que su capital humano es fundamental para el desarrollo del negocio, cuando se trata de ciberseguridad, el factor humano representa el mayor desafío para implementar una estrategia de ciberseguridad.

De acuerdo con el mismo reporte, 55% de los encuestados consideran a los empleados como el eslabón más débil en estrategia de defensa ante ciberataques, que es la garantía para la sostenibilidad de la transformación digital en las organizaciones.

El reporte también destaca que cada 11 segundos, se produce un ataque cibernético o de ransomware, al tiempo que para las organizaciones el costo promedio por ataque cibernético puede llegar a los US$13 millones.

Para el 84% de los líderes de Tecnología de la Información (TI), la prevención de la pérdida de datos por ciberataques es más desafiantes en los entornos de trabajo remoto, mientras que 70% de los ataques a la ciberseguridad de las empresas se genera por fallos de comportamiento a nivel del usuario final.

Para Estalinao Bachrach, consultor en creatividad, innovación y biotecnología, ante un estado de asedio y/o riesgo, como antes los desafíos de un cambio organizacional, los grupos humanos experimentan emociones displacenteras que activan por lo menos tres tipos de reacciones.

Estas reacciones podrían estar entre los sectores que se muestran apáticos ante los riesgos y no se involucran en los cambios, los sectores que niegan la posibilidad de ser víctimas de las amenazas, y los grupos que se comprometen con las acciones de reparación o transformación de la realidad.

Por su parte, Luis Gonçalves, Presidente de Dell Technologies Latinoamérica, destacó que si bien para la empresa la seguridad está presente desde la concepción de las plataformas de infraestructura y equipamiento que todos sus miembros y clientes usan; ante las amenazas crecientes, las empresas deben armar a sus empleados con el conocimiento adecuado y la comprensión de cómo pueden ayudar a frustrar a los ciberdelincuentes si siguen los requisitos de seguridad que su organización ha establecido.