“Reflexiones sobre la necesidad de medidas Tributarias ante la crisis Covid-19”

No pretendo ser clarividente ni muchos menos, pero mientras más reviso experiencias de empresas a nivel local e internacional en esta época de crisis Covid-19, no encuentro ni encontraré ninguna solución única, para por lo menos los próximos dos años, siendo optimista. Sin embargo, podemos cambiar el escenario o reconstruir la situación actual.

Situaciones adversas como la insolvencia, potenciales quiebras, deterioros en los activos financieros y no financieros, deterioro de activos fijos, posibles cartera de créditos llevadas a pérdidas en entidades financieras, patrimonios fiduciarios que garantizan obligaciones con potencial deterioro en su valor, disminución del valor de los inmuebles, en fin, una serie de situaciones que anteriormente no habíamos
experimentado.

Considerando lo anterior, todo tiene un común denominador, es decir, el flujo de efectivo que necesitamos inyectar a la economía del país, todos guardamos muchas esperanzas de que las cosas mejoren, sin embargo, si no contamos con planes estratégicos robustos, de nada nos servirán las esperanzas. Y cuando menciono planes estratégicos, no solamente me refiero a que la empresa privada deba considerarlo, sino principalmente el Estado.

La planeación estratégica es una herramienta de gestión utilizada desde hace muchísimos años, con el propósito de alinear el camino para lograr metas, teniendo en cuenta los cambios y demandas que se presentan en el entorno donde nos desenvolvemos para lograr utilidades y crecimiento económico. Ciertamente para lograr una planeación estratégica, debemos considerar etapas como la de alinear la empresa o al Estado con las estrategias, como se llevará a cabo dichas estrategias? y como las vamos a implementar? Sobre esto último, aún no percibo, por lo menos mi persona, de una planeación estratégica concreta en nuestro país.

Debo reconocer que el Estado, en el corto plazo, ha implementado iniciativas flexibles a los contribuyentes respecto a la presentación y pago de impuestos, pero? Y el mediano y largo plazo? Cuáles serán las iniciativas? De esto se trata la planeación estratégica del Estado...

Uno de los escenarios que considero sumamente importante y que tendrá repercusiones negativas, tanto para las personas naturales y jurídicas, inclusive para el Estado como sujeto activo, es la recaudación tributaria, porque en estos momentos las necesidades alimentación y vivienda para los sujetos pasivos (Contribuyentes) son prioridad...comparado con el pago de impuestos ...parece duro cierto? pero es la realidad actual. No obstante, para que podamos percibir beneficios públicos, será necesario la recaudación...es una cadena en donde circulamos todos, pero es vital encontrar el punto medular de la cadena, que ayude a aliviar las cargas.

Haciendo un poco de historia, Panamá sufrió una invasión en el año 1989, lo cual produjo graves afectaciones, no solo políticas sino también económicas y financieras. Sin embargo, recuerdo que se promovieron iniciativas tributarias como por ejemplo, el Decreto No.60 del 23 de febrero de 1990, mediante la cual se establecieron medidas respecto a las pérdidas sufridas por los Contribuyentes en el periodo fiscal de 1989.

Para poner en contexto mi escrito, cito el artículo 1 del Decreto 60 de 1990, cuyo contenido estableció que el Contribuyente podría deducir de la renta bruta, el importe de las pérdidas neta de bienes productores de la renta gravable como consecuencia de los actos vandálicos ocurridos a partir del 20 de diciembre de 1989. Adicionalmente en su contenido, se incluyeron los mecanismos y cálculos del reconocimiento de las
pérdidas a ser consideradas en la declaración jurada de rentas de 1989.

Ahora bien, he traído este Decreto histórico a la palestra porque, estamos seguros que no se trata de una situación similar, ya que los efectos de esta pandemia de hoy, tiene alcances y repercusiones superiores a la histórica invasión de 1989, sin embargo, quiero rescatar del citado Decreto que, fueron medidas propuestas e implementadas en ese momento para coadyuvar a la economía y por consiguiente a reconocer a los Contribuyentes las pérdidas que realmente se reflejarán en las declaraciones juradas de rentas de 1989. Sobre esto último no he escuchado ninguna iniciativa.

Como iniciativa para este período fiscal 2020, se debería revisar la posibilidad del reconocimiento de las pérdidas vinculadas al cierre temporal por Covid-19, podría ser una alternativa que tendría un impacto positivo en el mediano plazo, claro que se deben considerar todos aquellos requisitos necesarios para identificar que efectivamente hubo una afectación financiera y económica, debidamente certificada por profesionales idóneos y en cumplimiento a lo que pueda ser señalado en normas para cumplirlo.

La recaudación del ITBMS, ha tenido una notable disminución, sin embargo, cuál sería la estrategia para que esto No impacte a los agentes de retención y tampoco al Estado... pues, creo que hay también que motivar iniciativas que logren un balance en el reconocimiento entre lo que se debe pagar y lo que se retiene.

La Depreciación de activos, tiene consideraciones fiscales para su reconocimiento, sin embargo, ahora con el cierre de las empresas durante la cuarentena, ha producido deterioros de los activos mucho más acelerados por falta de mantenimientos o bien en aquellos inventarios de bienes perecederos, una alternativa viable podría ser que se implemente una metodología especial de reconocimiento del deterioro, así como los periodos y plazos a ser declarados como deducibles, esto definitivamente que va a tener repercusiones en los resultados de las declaraciones juradas de rentas, pero que podría aliviar a los sujetos pasivos (contribuyentes) en cuanto al impuesto a pagar.

Mis reflexiones en materia tributaria van dirigidas a llamar la atención de todos los involucrados, es decir, sector público y privado, ya que precisa revisar las actuales leyes, decretos y regulaciones que puedan estar limitando el flujo de efectivo de los Contribuyentes y por consiguiente la afectación de la recaudación de la Administración Tributaria.

“Esta crisis es un problema de todos...y por ser un problema de todos...debemos involucrarnos en iniciativas que logren resultados positivos en la planeación estratégica de nuestro país.”